Entrevistas|agosto 2025

Ryan Willms, sobre aceptar la quietud

Al integrar el movimiento y la atención plena e infundir al deporte una perspectiva más suave y espiritual, estamos equipados con las herramientas para escuchar nuestras necesidades cambiantes y podemos aprender a cultivar una vida de armonía, conexión y bienestar sostenible, según afirma Ryan Willms, director creativo y coach de vida holístico afincado en Los Ángeles.

Después de mudarse a Nueva York para emprender una nueva carrera profesional como director de arte para la marca de ropa de calle Stüssy, el creativo canadiense Ryan Willms tomó la decisión de dejar todo el trabajo y poner fin a la publicación de su influyente revista de ropa de hombre, Inventory. Recién llegado a la ciudad más animada e interesante del mundo, evitaba a sus amigos y se aislaba en su apartamento. 

Ryan Willms Interview

«Me di cuenta de que no me encontraba en un buen lugar», asegura Willms. «Mi cuerpo me había indicado que tenía que ir más despacio, pero en ese momento no estaba lo suficientemente atento como para poder escucharle. Pensé que la respuesta era esforzarme cada vez más. Trabajar más duro, correr más. Con el tiempo, llegué a un punto en el que me encontraba muy deprimido y me di cuenta de que, si no bajaba este nivel de intensidad, nunca iba a poder sanar». 

Ryan Willms Interview
Ryan Willms Interview

¿De qué maneras crees que la práctica de la atención plena puede ser beneficiosa para correr y otras formas de ejercicio? 

«En un nivel básico, la meditación ayuda a crear una conciencia de lo que está sucediendo y cómo te sientes. Si estás corriendo, o si vas a una carrera y te sientes nervioso, puedes usarlo para calmarte nervios y relajarte. Y eso también puede ser antes de una reunión. Si vas a correr una carrera de 10 km, o una media maratón, o más, suele haber un punto en el que te preguntas por qué lo haces, y la meditación puede ser una forma estupenda de familiarizarte con ese pequeño espacio y prepararte para ese momento. 

 

Más allá de eso, hay muchos métodos y modalidades de meditación que considero que son increíblemente poderosos. La visualización puede resultar muy útil, y es algo que la gente ha estado usando durante mucho tiempo. Muchos deportistas visualizan el juego, cómo realizar determinados lanzamientos, incluso si no saben que necesariamente están meditando. Cuando visualizas algo, realmente sientes la sensación de que está sucediendo. El cuerpo no conoce la diferencia entre la vida imaginada y la real, por lo que se siente cómodo con ella. "Puedo hacer eso". No lo sientes como algo fuera de tu alcance». 

Ryan Willms Interview

En tus pódcasts, has compartido tu camino hacia el triatlón, pero también tus luchas con la inseguridad personal y la necesidad de la aprobación de otras personas. ¿Cómo equilibras estas cuestiones con el entrenamiento extremo? 

«En los últimos meses, me he dado cuenta de que, en lo más profundo de mí, no siento que sea lo suficientemente bueno, y eso es algo que habría empezado muy pronto en mi vida. A medida que crecemos, aprendemos a crear determinadas condiciones para sentirnos aceptados y amados. Cuando esas condiciones van desapareciendo en la vida, ya no sirven, te quedas luchando por averiguar qué hacer.  

 

Es algo inconsciente. No estoy pensando de manera literal "tengo que apuntarme a un triatlón y luego seré lo suficientemente bueno». Pero me doy cuenta de que eso ha sido una gran motivación para mí a lo largo de toda mi vida, ya sea iniciando un negocio o haciendo un pódcast, y ciertamente, el triatlón también es una de esas cosas. Incluso mi viaje espiritual. Darme cuenta de que esto ha afectado a casi todo lo que he elegido hacer ha resultado todo un reto. Ha sido un proceso durante el último año, en el que he dejado todas estas cosas que he estado tratando de usar para sentirme mejor.

 

Hay una hermosa metáfora del ego: es como un bloque de hielo. Dale calor, sol y amor, y se derretirá lentamente y volverá a ser agua, lo cual es una metáfora constante de flujo y fluidez. No queremos deshacernos por completo del ego, no queremos aniquilarlo, sino simplemente permitir que se relaje y se funda de nuevo en nosotros mismos, para encontrar un estado natural de paz y de ser.

 

En el último año, he empezado a leer filosofía taoísta, que tiene mucho que ver con el no hacer, no forzar. Creo que es realmente hermoso, pero está muy lejos de cómo nos comportamos. En nuestro mundo actual, todo se trata de hacer. Incluso la recuperación se trata de hacer. Resulta difícil no hacerlo. Siempre he querido ir a una clase de yoga y descansar en shavasana [una postura en la que se está tumbado quieto en el suelo] todo el tiempo, sin hacer nada, y dejar que todos los demás hagan sus movimientos a mi alrededor. Creo que resultaría un hermoso desafío».